Tener una buena plataforma digital es la garantía de que tus clientes confíen en tu negocio. Lo primero que verán será tu sitio web, cómo se distribuye y qué funcionalidades les ofrece, por lo que debes tener un servicio lo más simple y accesible posible, sin rayar en lo simplista, para lograr el equilibrio perfecto. Y además, transmitir la esencia de tu marca o negocio, ¡es clave!